En este espacio disponéis de una sala de espera en el lado derecho.

Justo enfrente, está la consulta de Monitorización Prenatal. A vuestra llegada, avisaréis a la matrona para que os llame cuando haya un sillón libre.

Si el embarazo es de bajo riesgo, os programan la primera consulta en monitores al cumplir la semana 40.

En el caso de que tengáis alguna enfermedad o surja alguna circunstancia durante el embarazo (bajo peso, poco líquido amniótico, embarazo gemelar, preeclampsia, diabetes gestacional, etc.), os adelantarán esta cita.

Cuando no tengáis más citas con el tocólogo en La Lila o en la consulta de alto riesgo en el HUCA, o bien os encontréis en la semana 41, os realizarán el seguimiento en la consulta pegada a Monitores, que dispone de una camilla de exploración y un ecógrafo.

Allí os darán cita para volver a monitores.

A partir de la semana 41 del embarazo, los controles se harán cada 48 horas hasta la semana 42, momento en el que se inicia el proceso de inducción del parto en condiciones de bajo riesgo.

Si cuentas con alguna patología, el momento de la inducción se decidirá de forma individualizada valorando siempre riesgo/beneficio.